Trabajar en el sector automoción es como estar en una carrera constante contra el tiempo. Para uno de nuestros clientes, un fabricante con presencia global y más de 15 centros de producción, el verdadero desafío estaba en lograr que la logística y la producción trabajaran mano a mano. Antes de nuestra colaboración, había un hueco considerable entre lo que la producción necesitaba y lo que la logística podía entregar en tiempo y forma.
El problema: desfases entre necesidades y suministro
La logística, el corazón de la cadena de suministro de la automoción, estaba latiendo a un ritmo incierto. A menudo no sabían cuándo entregar los componentes esenciales a las líneas de montaje, lo que provocaba retrasos y afectaba la productividad. No es de extrañar que, en este entorno, cada pequeña interrupción pudiera traducirse en grandes pérdidas.
Nuestro enfoque: clave en la precisión del suministro
Nuestra solución no fue solo tecnológica, sino también estratégica. Implementamos un sistema que proporciona a logística una visibilidad clara de lo que ocurre en producción. Así, pudieron recibir alertas proactivas, ajustar los suministros y mantener las líneas de montaje en movimiento sin interrupciones innecesarias.
El impacto: un flujo constante y sin sorpresas
La diferencia se notó rápidamente. Con el sistema de avisos de ZEO MES y un suministro de componentes alineado con el ritmo de producción, la eficiencia logística se disparó. Menos tiempos muertos y entregas puntuales se convirtieron en la nueva norma, mejorando la entrega a tiempo entre un 20% y un 40% dependiendo de la referencia y proceso.
Con este cambio, nuestro cliente no solo ganó en eficiencia; también en la tranquilidad de saber que la logística no es un obstáculo, sino un aliado de la producción. En un sector donde cada minuto cuenta, ayudamos a nuestro cliente no solo a mantener el paso, sino a liderar la carrera.
